Messi ya no está en el Barcelona, ha dejado LaLiga. La ausencia de Messi pesa en muchos sentidos y la afición ya lo dejó claro desde la grada. A pesar de ello, los blaugranas dieron una gran muestra de fútbol y aunque sufrieron un poco sobre el final, se llevaron un triunfo de 4-2 sobre la Real Sociedad en el juego de la jornada 1 de la temporada 2021 de LaLiga de España en el Estadio Camp Nou.
El primer partido de la era ‘sin Messi’ era complicado para los de Koeman. Le visitaba una Real Sociedad que va a más en los últimos años y que quiere dar continuidad al título copero logrado en Sevilla. El técnico holandés sacó un once en el que sorprendía la titularidad de Eric García por delante de Araujo y la presencia obligada de Neto y Braithwaite por las lesiones de Ter Stegen y Kun Agüero o Dembélé. Un equipo en el que ante la ausencia del rey es momento de que aparezcan los ‘príncipes’. Y ahí sí que hay muchos a las órdenes de Koeman.
El inicio del partido fue una declaración de intenciones de los azulgranas. Braithwaite puso a prueba a Remiro a los 29 segundos y al minuto y medio Griezmann remató alto en otra buena ocasión. La idea era clara. No mostrar la más mínima sensación de duda en el juego ante la ausencia de Messi y que los realistas no se lo creyeran en ningún momento.
Pasado el minuto nueve Griezmann casi marca un golazo con un remate de volea a pase de Jordi Alba. Sólo unos segundos antes de que en el minuto 10 se escucharan gritos de ¡Messi, Messi! en la grada. En el minuto 11 Memphis cabeceó al larguero. La puesta en escena de los barcelonistas antes de cumplirse el primer cuarto de hora no podía ser mejor. El agobio de los jugadores donostiarras era evidente.
El gol era cuestión de minutos. Y llegó tras una jugada a balón parado. Memphis sacó una falta medida a la cabeza de Piqué para que este batiera a Remiro desde cerca y libre de marca. El gol tuvo hasta algo de poético después de que el central se bajara el sueldo para que pudiera ser inscrito quien le dio la asistencia.
La Real era incapaz de tener el balón ante la presión del Barça y encima la ausencia de Isak por lesión le restaba mucho en ataque. Memphis rozó el 2-0 antes de la media hora tras un pase de Braithwaite. El neerlandés estaba con tanta confianza que lo intentó también desde casi el medio del campo, pero no sorprendió a Remiro. El partido quedó sentenciado al borde del descanso. Robo del Barça, con posible falta a Januzaj, contra azulgrana con centro de De Jong y cabezazo de Braithwaite. No hubo tiempo para más.
Se antojaban cambios en la Real y así fue. Imanol, tras el descanso, dejó en la caseta a Januzaj y Silva -desaparecidos en la primera parte- y dio entrada a Barrenetxea y Bautista. El guión era parecido, pero con una Real más despierta en ataque. Jordi Alba, a pase de De Jong, tuvo el 3-0 en un mano a mano que falló con todo a favor pero los vascos empezaron a tener más balón.
Un 2-1 les metía en el partido y esa era su intención. Pero nada más lejos de la realidad. Braithwaite dejó claro que quiere seguir y dobló su cuenta goleadora tras recoger un rechace de Remiro dentro del área. Este gol acabó con la reacción de la Real y parecía que con el partido.
Llegaron los cambios y con ellos tres debuts. Lobete en la Real y Emerson y Nico en el Barça. Parecía todo sentenciado y nadie contaba con la reacción final de la Real. Algo tardía, pero no se podía ir del Camp Nou con la imagen que estaba dando hasta el minuto 82. Porque en ese minuto un gran pase de Barrenetxea lo mandó a la red el debutante Lobete y, tres minutos después, una falta del también debutante Nico, posibilitó el 3-2 tras un gran lanzamiento de Oyarzabal.
Llegó el suspense a la grada, la Real soñó con el empate, pero en una contra Sergi Roberto sentenció tras una asistencia de Braithwaite. A ver quien le saca ahora del equipo al danés…
Con información de Marca Claro.