La última aparición de Julio César Chávez sobre el cuadrilátero dejó a Saúl ‘Canelo’ Álvarez como ‘culpable’. La leyenda mexicana del boxeo aseguró en entrevista con Yordi Rosado que el subir al Canelo a su esquina provocó el enojo de sus hijos, Omar y Julio César Chávez Carrasco.
«Yo los adoro y los quiero mucho, pero ahorita no me hablan, están enojados porque subí al Canelo (al ring) ahora que hice la exhibición, porque el Canelo subió al ring conmigo, que porque no subieron ellos. El muchacho estaba bien alegre y yo lo subí porque me nació, les dije que ellos ya han subido y se enojaron conmigo y no me hablan», aseguró Chávez.
El oriundo de Ciudad Obregón, Sonora, reconoció que la relación con sus vástagos siempre ha sido complicada:
«Es un poco triste, siempre ha sido complicada la vida con mis hijos por las comparaciones que hay, sobre todo en el boxeo y después de ver a su padre caer a lo más bajo, ver cómo hizo sufrir a su madre, seguir los pasos de su padre… Ha sido muy difícil esa relación de mis hijos».
Bajo la misma línea, Chávez reveló: «Ha sido duro porque yo a veces he tenido que internar a mis hijos y eso como padre duele mucho, pero yo pienso que todo va a salir bien pronto».
Fue el pasado 20 de junio que Chávez dijo adiós al boxeo en una pelea de exhibición ante Héctor ‘Macho’ Camacho Jr. Para el cuarto round, JC le pidió al Canelo sumarse a su esquina e incluso al final le dedicó algunas palabras:
«El Canelo es un gran peleador, lo admiro mucho como deportista, como persona. Es un peleadorazo el cabrón, no lo duden que llegue a ser el mejor de la historia. Lo que yo hice nadie me lo quita, llegar a 90 peleas invicto, no lo van a volver a ver».
Con información de MARCA CLARO.