Concluyó la participación de la delegación mexicana en el 52 periodo de sesiones del Consejo de Derechos Humanos (CoDH), en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Ginebra, Suiza.
Durante seis semanas, el principal órgano de derechos humanos de la ONU sesionó para dialogar sobre distintas temáticas en el plenario, entre las que destacan: el derecho humano a un medioambiente sano, limpio y sustentable, el derecho de las minorías, el derecho de las personas a la identidad, entre otros.
En el segmento de alto nivel, al inicio de los trabajos del Consejo, donde participaron más de 147 representantes de países, organismos especializados y otras organizaciones internacionales que se dirigen al CoDH para dialogar sobre las acciones de sus gobiernos e instituciones, a fin de promover y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales a nivel internacional, se destacó la importancia de revitalizar la solidaridad que condujo a la Declaración Universal de Derechos Humanos y garantizar su plena implementación para enfrentar los nuevos desafíos de hoy y mañana, recalcando que los derechos humanos han sido y siempre serán la mejor manera de contrarrestar la polarización, la injusticia y la crisis.
En dicho segmento, el director general de Derechos Humanos y Democracia de la Cancillería, Cristopher Ballinas Valdés, resaltó que si bien la conmemoración del 75 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos es una ocasión para reconocer los numerosos avances alcanzados, debe ser también un momento para un análisis crítico de la situación actual de los derechos humanos y cómo asegurar la efectividad de las instituciones con las que contamos. “Actualmente, estos desafíos son muy distintos a aquellos que previmos hace 75 años, incluso a aquellos que avizoramos en 2006. La realidad mundial está marcada por conflictos armados y violencia social, cambio climático y los efectos asociados a la pospandemia, así como por la inseguridad alimentaria, la pobreza y las desigualdades entre países y dentro de nuestras sociedades”.
Ahí se refrendó que México continuará impulsando el diálogo y la colaboración, convencido de que la cooperación con los mecanismos de derechos humanos es de gran apoyo en el fortalecimiento de las políticas nacionales. También, a través de su política exterior en materia de derechos humanos y su Política Exterior Feminista plus del Gobierno de México, se seguirá promoviendo el reconocimiento y participación efectiva y significativa de las mujeres y las niñas, así como de otros grupos en situación de vulnerabilidad, como una cuestión indispensable para lograr sociedades más justas e inclusivas.
Por ejemplo, durante la discusión de la resolución sobre el derecho a un medioambiente limpio, sano y sostenible, México afirmó que “resulta importante no sólo implementar de manera efectiva los acuerdos multilaterales ambientales, sino que su cumplimiento sea respetuoso también con obligaciones internacionales en materia de derechos humanos. Tampoco podemos dejar de lado el desarrollo del derecho internacional de los derechos humanos mediante el trabajo de los órganos de tratados y de tribunales internacionales en los últimos años que reconocen este derecho. Para atender de manera efectiva los retos ambientales globales, se debe adoptar innegablemente una perspectiva de derechos humanos, en la cual se reconozca plenamente el derecho a un medioambiente sano, limpio y sostenible”.
En total, se llevaron a cabo 57 reuniones plenarias, de las cuales 39 corresponden a diálogos interactivos con los distintos titulares de mandatos de los procedimientos especiales del Consejo y mecanismos de derechos humanos. Sobresalen los diálogos con la relatora especial sobre el respeto y promoción de los derechos humanos y las libertades fundamentales en la lucha contra el terrorismo; con el relator especial sobre los derechos de las personas con discapacidad; con el relator especial sobre los derechos sobre las cuestiones de las minorías; con el relator especial sobre la cuestión de las obligaciones de derechos humanos relacionadas con el disfrute del medioambiente limpio, saludable y sostenible; con el relator especial sobre el derecho a una vivienda adecuada, y con el relator especial sobre el derecho a la alimentación.
Además, nuestro país participó en el segmento de alto nivel de la sesión, en el debate general de los temas 2 y 7, y en el debate interactivo actual sobre los derechos de las personas con discapacidad, y el día de discusión anual sobre los derechos del niño. Con todas estas actividades, esta sesión es la más larga de la historia con una duración de seis semanas, lo que, en palabras del alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, demuestra la relevancia de este foro para discutir asuntos en la materia.
Como parte de los trabajos en el marco del CoDH, México organizó un evento paralelo sobre migrantes desaparecidos, en coordinación con la Oacnudh, OIM, CICR y el relator especial sobre derechos de los humanos de los migrantes. De igual forma, nuestro país inauguró el evento #FIGHTracism: A conversation with Tenoch Huerta. La representante de México ante los Organismos Internacionales con sede en Ginebra moderó el evento «Disability, Torture and Recovery: Promoting a Human Rights-Base Approach to Mental Health Care for Torture Survivors”. México participó como panelista en el evento ainstreaming Statelessness and the Right to Nationality in the Universal Periodic Review: UPR Third Cycle Evaluation and Lessons for the Future”. De igual manera, nuestro país fungió como copatrocinador del evento paralelo sobre rendición de cuentas sobre los derechos humanos de mujeres y niñas en contextos humanitarios, y defensa de los estándares internacionales de derechos humanos respecto a los derechos de las mujeres para hacer frente a los retrocesos.
Los miembros del Consejo tuvieron conocimiento de la elección de la mexicana Ana Lorena Delgadillo como parte experta del Grupo de trabajo sobre las desapariciones forzadas o involuntarias. Asimismo, México anunció su candidatura al Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, para el periodo 2025-2027. Nuestro país ha mantenido una participación constante en el CoDH, con objeto de garantizar el ejercicio efectivo de su mandato en todo el mundo. Ese liderazgo le ha valido el reconocimiento internacional que se ha visto reflejado en su elección como miembro del Consejo en los periodos 2006-2009, 2009-2012, 2014-2016, 2018-2020 y 2021-2023.
Durante su membresía, México ha trabajado para avanzar la agenda internacional de derechos humanos, al tiempo de fortalecer los estándares e instituciones del sistema universal en la materia. Como miembro del CoDH, México se ha comprometido a promover la cooperación internacional, bajo los principios de buena fe y corresponsabilidad de los Estados, del propio Consejo y de los otros órganos del sistema universal de derechos humanos, para generar sinergias que permitan implementar las mejores prácticas y estándares internacionales en el cumplimiento efectivo de nuestras obligaciones internacionales en materia de derechos humanos.
En sus últimos dos periodos en el Consejo de Derechos Humanos (2018-2020 y 2021-2023), México ha ocupado la vicepresidencia del Consejo en 2020, donde sus prioridades son Derechos de las mujeres e igualdad de género sustantiva. Asimismo, ha presentado 38 resoluciones en el CoDH de forma individual o como parte del grupo núcleo. Dichas resoluciones se han enfocado en los derechos humanos de los grupos en situación de vulnerabilidad: mujeres (Eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres y las niñas), pueblos indígenas, protección y derechos de migrantes, moratoria en la aplicación de la pena de muerte, derechos de las personas con discapacidad, entre otras.
Es bajo este enfoque de colaboración y diálogo que México presenta su candidatura al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para su elección al periodo 2025-2027, cuyas elecciones se realizarán en la 79 Asamblea General de la ONU en 2024, con el fin de continuar avanzando la agenda internacional de derechos humanos, así como de fortalecer los estándares e instituciones del sistema universal en la materia.