Lo que empezó siendo una mera anécdota de pretemporada ha terminado convertido en una crisis en toda regla para unos Lakers que no terminan de carburar y que comenzarán la liga con un balance de seis derrotas y ninguna victoria en los partidos de preparación tras caer en su último amistoso ante los Sacramento Kings por 116-112.
Por segundo partido consecutivo Frank Vogel podía contar con todo su arsenal en la cancha, pero ni por esas los angelinos fueron capaces de cerrar la pretemporada con buenas sensaciones. Especialmente en un primer cuarto en el que los Lakers salieron demasiado relajados en defensa y cuando se quisieron dar cuenta ya iban 12 abajo (35-23). Una renta que más tarde les sería imposible de remontar.
Los Kings, que se mantienen invictos en los partidos de preparación con cuatro triunfos en otros tantos partidos, se mostraron muy serios en ataque dirigidos por un buen De’Aron Fox, que terminó el choque con 21 puntos y cinco asistencias. Richaun Holmes fue el mejor jugador bajo los aros con un doble-doble de 15 tantos y 10 rebotes, mientras que Terence Davis salió desde la banca para ser el segundo mejor anotador de los Kings con 20 puntos en su cuenta.
Cifras que resultaron demasiado para los Lakers a pesar del buen partido de LeBron James. El veterano alero llega a su 18ª temporada por la puerta grande tras firmar 30 puntos (12 de 20 en tiros de campo y dos de cinco desde el triple), seis rebotes, seis asistencias y dos tapones en 29 minutos de juego.
Junto a ‘King’ James destacaron los números de Russell Westbrook, que empieza a tomar el aire al equipo. El base terminó con 18 puntos, cinco asistencias y tres rebotes, mientras que el otro miembro del ‘Big Three’ angelino, Anthony Davis, firmó 14 tantos y 12 rebotes bajo los aros, pero no fue suficiente para evitar la palabra crisis en el entorno de los Lakers.
MARCA CLARO